DOORS, Capitulo II: MALIBÚ

Eran las 5:30 pm, ya estaba en casa, y muy ansiosa de ir a la playa con Connor. Tomé un baño largo con agua tibia, cuando vi el reloj ya eran las seis, me puse lo primero que vi, pero no me gusto así que me volví a cambiar.

Salí de la casa a las 6:15pm me subí a mi auto y logré llegar a las 6:35pm, para mi suerte el también acababa de llegar y lo sé porque lo vi bajarse de su auto.

Él también me vio bajarme del auto porque se vino corriendo justo donde yo estaba y me dijo que estaba muy feliz de verme, me tomó de la mano y mi corazón se aceleró de una manera que nunca me había sucedido pensé que tendría un paro cardíaco en ese momento.

Me llevó corriendo justo a la orilla del mar, nos sentamos a ver el atardecer tomados de la mano con el agua tocándonos los pies, fue el momento más romántico que había tenido.

Me quedé mirándolo unos 30 segundos cuando él también volteo a mirarme, nuestras respiraciones se cruzaron, nos miramos fijamente, sintiendo que éramos las dos únicas personas en el mundo, ahí fue cuando me acarició la mejilla.

-No puedo creer toda la fuerza de voluntad que tengo, estos 30 segundos han sido los más duros que he pasado en toda mi vida, si supieras todas las ganas que tengo de besarte en estos momentos, pero no lo pienso hacer hasta que estés tan loca por mí que tengas que pedírmelo.

Eso nunca va a pasar, Dije yo.

Agaché mi cabeza y me empecé a reír.

-¿Nunca estarás loca por mí?

Ya lo estoy, pero no creo que llegue a pedirte que me beses.

Me levanté y empecé a correr, - grité, intenta alcanzarme. Él se levantó inmediatamente y comenzó a seguirme, era mucho más rápido de lo que pensé.

Cuando finalmente logro alcanzarme, le dije que él me había regresado a la vida.

-No voy a esperar a que estés loca.

Demoré 2 segundos en entenderlo, ese fue justo que le tiempo que duró para que nuestros labios se juntaran, luego pasó lo típico de las películas, llovió pero fue una lluvia muy distinta a la que conocemos.

Eran unos niños que estaban en la playa jugando con bombas de agua, y el blanco éramos nosotros, sólo se escuchaban sus pequeñas risas, luego Connor y yo salimos a correr en busca de nuestros autos.

Fuimos a la heladería más cercana y compartimos una banana Split, luego solo nos quedamos hablando hasta que una de las señoritas que trabajaba en la heladería nos sacó porque ya era hora de cerrar.

Nunca sentí que el tiempo pasara tan rápido, ya eran las 11:30 pm, no estaba cansada, estaba feliz de este increíble día.

Ambos vivíamos en Los Angeles así que fuimos a la casa de él, me quedaría a dormir, ya no tenía que darle explicaciones a nadie del porque no habría de llegar a casa. En el camino sólo pensaba en que ya no me interesaba volver a la universidad y no por él, bueno solo una parte, la verdadera razón era que me sentía mucho mejor conmigo misma, actuando que haciendo algo distinto.

Cuando llegamos a su casa quedé sorprendida de lo bella y grande que era. Me dijo que quería que viéramos una película, obviamente yo le respondí que sí.

Me senté en el sofá de la sala, cuando Connor llego traía con el muchas palomitas y 2 sodas, le pregunté que cuál era el nombre de la película.

-No te pienso decir, solo sé que te va encantar, es muy vieja pero es muy buena.

Debo admitir que sí fue muy buena la película pero sentí que la escogió para intentar decirme algo, la verdad es que no terminé de verla me quedé dormida en sus brazos.

Al al día siguiente él se despertó primero que yo, luego me despertó a mí. Como no estaba en mi casa, no tenía nada que ponerme excepto que su ropa. Ya que antes de empezar con esto de la actuación, trabajé en diseño de modas, pude improvisar un atuendo con su ropa sin necesidad de una máquina de coser. Solo con mi ingenio, unas tijeras y una camisa gris y larga.

Cuando llegamos al estudio fui con todas mis amigas para contarles todo lo que sucedió ayer y también sobre la película. Primero vi a Peyton y a Hanna.

Shay!!! ¡Cuéntame todo! … – Dijo Hanna.

– Hanna no grites tanto, le dije.

Bueno Shay, ya sólo dime todo lo que sucedió ayer –Dijo Hanna.

¿Por qué crees que pasó algo?, le dije.

-Ay por favor Shay, solo dinos –Dijo Peyton.

– Está bien, ya cálmense, pero primero les voy a contar sobre una película que vi ayer con él y llamó mucho mi atención, les dije.

Está bien pero que sea rápido – Dijo Peyton.

Yo sólo me reí.